Señor Director:
En momentos de alta inflación y ad portas de una recesión, la propuesta de Hacienda de no postergar el IVA a los servicios a partir del 01 de enero de 2023 constituye una carga adicional a la pesada mochila de las Pymes, un sector relevante de la economía que
entrega el 60% del empleo, siendo un 30% de las Pymes las que se orientan al servicio. Si bien el IVA lo paga el consumidor final no se debe perder de vista la elasticidad precio de la demanda, más en momentos en que la economía pasa por un mal momento y el precio es un factor sensible para el consumidor final. Para competir parte de ese IVA lo asumirán como menor precio los prestadores de servicios, cuyos márgenes de negocio ya son estrechos, por lo que la medida es un verdadero golpe de gracia por parte del Estado a las Pymes, a pesar que se anuncia a los cuatro vientos tener en el centro de las políticas públicas a este sector.
Pues bien, el Estado argumenta mantener la medida de IVA a los servicio a pesar de los llamados a postergar de diversos sectores, existiendo soluciones alternativas sostenibles y eficientes. Como Colegio de Contadores de Chile propusimos seis medidas a Hacienda
tendientes a compensar la recaudación de la postergación y/o derogación del IVA a los servicios. Una de ellas es
fomentar decididamente y con herra mientas potentes la formalización de los negocios para llevar a los niveles de la OCDE, una medida que agregaría 10 veces más recursos, no solo por mayor recaudación de impuesto, sino también por mayor aporte a los fondos de
seguridad social, problema raíz en las bajas pensiones. No obstante, se opta por el camino contrario al establecer una medida que en vez de apoyar la formalización de los negocios propicia la informalidad.
Juan Alberto Pizarro
Presidente Comisión Tributaria Colegio
de Contadores de Chile