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Ñublense arranca la segunda rueda con una tarea pendiente: mejorar la pobre campaña como forastero del primer semestre que no superó el 28 por ciento.
Y la primera estación será durísima. Este sábado, a las 12.30 horas, visita, en el estadio Francisco Sánchez Rumoroso, al sorprendente sublíder del Torneo de la Primera A, Coquimbo Unido.
Un cuadro al que Fernando Díaz, ex técnico de los diablos rojos, le ha dado un sello táctico que lo tiene peleando el título esta temporada.
El entrenador del Rojo, Mario Salas, anticipó que la tarea será compleja, pero están mentalizados en dar un golpe en el puerto pirata para traerse parte del motín o el motín completo.
“Yo siento que es un rival distinto sin Cabral, que era determinante para el juego del equipo. El no tener a ese jugador cambia la forma de jugar de un equipo, aunque Fernando (Díaz), logró un afiatamiento, en el que puede utilizar a algunos jugadores en distintas tareas. Vamos a esperar a un Coquimbo con una idea afiatada, una convicción y jugadores que están en gran nivel como Escobar, Diego Sanchez, Dylan Glaby, Camargo, Gallani, la sorpresa de Mondaca, lo de Chandía, Barrera, Cornejo, Cabrera, Johansen, ya tiene una forma arraigada de jugar”, analizó Salas, quien profundizó el scanner sobre su rival.
“Y si le sumamos la llegada de del volante argentino Juan Manuel Vásquez, lo hace un rival competitivo, difícil, de doblegar. Es un desafio tremendo lograr la victoria ante el segundo mejor equipo de la competencia, es una de las mayores potencias del fútbol chileno, es motivante lograr un triunfo para seguir en post de los objetivos”, recalcó Salas, quien tiene plantel completo para este sábado.
Los piratas, que son sublíderes con 31 puntos, a uno de la U, lamentan la baja del centrodelantero argentino Andrés Chávez, quien sufrió un desgarro.
Los diablos rojos arrancan el segundo semestre en el segundo lugar con 19 puntos y el objetivo de alcanzar un cupo a la Copa Sudamericana.