Close
Radio Radio Radio Radio

No bajar la guardia

Mauricio Ulloa

Levantar la cuarentena en la intercomuna fue una decisión acertada, bajo el supuesto de que hay señales de que se están logrando los objetivos de disminuir la tasa de contagios y de mantener la capacidad hospitalaria en un porcentaje que permita la efectividad en los tratamientos para los afectados que requieren atención.

Ayer, la Región presentó 41 nuevos contagios de coronavirus, acumulando un total de 6.712 notificados con la enfermedad. El reporte dio también cuenta de 340 casos activos y 914 exámenes PCR en las últimas 24 horas que arrojaron un 4% de positividad diaria. Lo cierto es que sin ser concluyentes, estos números son favorables desde el punto de vista epidemiológico. Y eso es una buena noticia.

Cabe recordar que para alza el confinamiento total y obligatorio no solo se consideró el total de casos acumulados, sino también la cantidad de contagios nuevos en cada comuna, la incidencia por kilómetro cuadrado, la tasa de pacientes recuperados, la capacidad de la red hospitalaria, además de otros parámetros sociales como la cantidad de adultos mayores y el nivel de observancia que la población local tiene de las medidas restrictivas que impone la autoridad para evitar la propagación de la enfermedad.

Igualmente, cabe precisar que seguirán operando en nuestra región los cordones sanitarios, el toque de queda, la obligación de usar mascarilla en lugares públicos, la suspensión de clases, y la prohibición de funcionamiento de locales de entretención (cines, teatros, restaurantes, pubs, discoteques), lo mismo que las reuniones masivas y los cultos religiosos.

Sobra reiterar la importancia de seguir de forma muy rigurosa las normas, no bajar la guardia, seguir siendo muy cautelosos e incrementar las medidas de control. A estas alturas sería imperdonable que por cuenta de eventuales negligencias o, simplemente, de desafortunados relajamientos en el seguimiento de las pautas sanitarias se pusiera a la ciudad a las puertas de una tercera cuarentena.

En esta tarea es muy importante la labor que cumplen las diferentes autoridades, pero si hay algo decisivo es el compromiso de la ciudadanía. Tanto en lo que concierne al comercio o a faenas de la construcción y al comportamiento de quienes deciden salir al espacio público, es imposible aspirar a que el Estado pueda ejercer un control total y permanente, como ha quedado demostrado en estas cuatro semanas. Por eso, la autorregulación bajo la consigna –que no pierde vigencia– de que cuidarme a mí es cuidar a todos, entra a desempeñar un rol vital.

Tal como sucede con los huracanes estamos en el ojo de uno de ellos, es decir, estamos peligrosamente expuestos en una situación de la que no sabemos cómo vamos a salir. No obstante, hay un camino para avanzar y es el autocuidado, la única vacuna que hoy tenemos a mano. No se puede vivir en cuarentena, parando la economía mes por medio, porque las consecuencias pueden ser peores que la misma enfermedad de la cual buscamos alejarnos.

Agregar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *

Leave a comment
scroll to top