Este viernes, el Gobierno anunció una serie de medidas en materia de educación, luego de las violentas protestas que se registraron en los últimos días por parte de estudiantes secundarios, quienes acusan una serie de falencias en sus respectivos establecimientos.
“Tenemos una coincidencia programática con muchas de las demandas de los y las estudiantes, entre esas la salud mental (…) la recuperación de infraestructura y la reparación en las brechas de aprendizaje que provocó la pandemia”, señaló el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila.
El secretario de Estado detalló que la primera medida consiste en una inversión de $10 mil millones destinados a la reparación o recuperación de infraestructura de diversos establecimientos educacionales. “Esperamos ver si es posible, a lo mejor, aumentarlo”, sostuvo.
“Lo segundo es la inversión de $11 mil millones en el programa de Habilidades para la Vida, el que vamos a coordinar junto con la ministra de Salud y sus equipos (…) Creemos que es una vía para llegar directamente en apoyo de los establecimientos para hacernos cargo de los temas de salud mental”, agregó.
Ávila recalcó que “como ministerio estaremos siempre disponibles para oficiar de puente entre los sostenedores, municipios, las y los alcaldes, los estudiantes y las familias para ayudarles a resolver los conflictos que probablemente muchos de ellos tienen”.
Respecto a las protestas, la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, señaló que “nada justifica los hechos de violencia, pero también creemos que es importante actualizar y revisar los protocolos de comportamiento de Carabineros sobre el resguardo del orden público”.
Vallejo anunció que se va a constituir una mesa de trabajo para revisar los protocolos “con participación de Carabineros (…), la Defensoría de la Niñez, el subsecretario de Educación y el Ministerio del Interior”.
“Para nosotros es sumamente importante que los protocolos de actuar de Carabineros frente al resguardo del orden público (…) tengan una mirada especial respecto a los lugares donde se trabaja y, cuando se trata de escuelas y estudiantes, estos deben tener pertinencia, ya que estamos hablando muchas veces de menores de edad y, por lo tanto, el comportamiento tiene que adecuarse”, zanjó.
