Luego de que el proyecto de ley durmiera cuatro años desde que la ex presidenta Michelle Bachelet lo firmara en septiembre de 2017; este jueves 9 de diciembre, a dos días de que se aprobara en el Senado con 21 votos a favor, 8 en contra y 3 abstenciones, Sebastian Piñera promulgó la Ley de Matrimonio Igualitario, convirtiéndose en un hecho histórico para Chile.
Alen Alegría, abogado de Somos Ñuble, fundación regional que vela por el respeto de la comunidad LGBTQIA+ , señaló que “sin duda es un derecho conquistado, hasta antes de esto éramos ciudadanos y ciudadanas de segunda categoría, porque no teníamos opción al matrimonio. Lo importante es que todas las personas tengamos accesos a los derechos y decidamos libremente ejercerlos o no, desde esa visión sin duda es un gran avance para la comunidad en materia de derechos civiles y entender que ya no se harán distinciones entre marido y mujer sino que entre cónyuges”.
“Creemos que si bien es una ganancia, por supuesto hay muchas cosas pendientes, se agradece que se haya aprobado y pensado sobre todo ahora que estamos en riesgo que salga electo una persona bastante antiderechos. No creo que lo vayamos a celebrar propiamente tal, nos falta políticas de salud para los compañeres trans, un robustecimiento de la Ley Antidiscriminación, una institucionalidad contra la discriminación. Entonces el matrimonio es una escala pero no va a eliminar la violencia que seguimos viviendo como comunidad”, afirmó Alegría.
Derechos para la disidencia sexual
Mientras que el ex candidato a consejo regional y primer candidato LGBTQIA+ de Ñuble, Vicente Badilla, indicó que “creo que lo más célebre del proyecto, políticamente hablando en el contexto de seguridad, es la filiación y formación de familia, el reconocimiento de igualdad ante la ley, el carácter laico y liberal que adopta el estado y el reconocimiento de la diversidad como valor, una riqueza identitaria para el país”.
Sumado a esto, recalcó que “muy personalmente, me emociona el simbolismo de la aprobación del matrimonio igualitario, porque abre un espacio que culturalmente era heterosexual, hacia personas de la disidencia sexual. Eso es realmente valioso en muchas generaciones de la población LGBTQIA+, porque un análisis político como el anterior generalmente nace de generaciones más jóvenes y deja fuera ciertas generaciones que necesitan encontrar espacios de equidad en lo valórico, cultural y social”.
Paso insuficiente
En tanto, Neptuno!, artista y cantante local que se autodenomina género fluido, recalcó que esta noticia “es un buen paso hacia la consideración de nosotres, nosotros y nosotras como personas con calidad de derechos iguales a todo el resto de ciudadanos y ciudadanas; pero igual considero que es un paso insuficiente, creo que hay que realizar mayores esfuerzos legislativos para protegernos y para que realmente seamos sujetos y sujetas válidas ante la ley que aún nos sigue discriminando; de todas formas siento que es histórico e importante”.
“Que felicidad que pueda ocurrir esto con una institución tan icónica como lo es el matrimonio, pero estamos tan faltos de oportunidades, sobre todo con las personas trans, que un matrimonio realmente, para la vida de muchas personas de la comunidad, no significa un impacto real y significativo profundo en sus calidades de vida”, aseguró Neptuno!.
La opinión del Gobierno en Ñuble
Desde la Delegación Presidencial en la región, su representante Cristóbal Jardúa, destacó la promulgación de la ley: “es un día histórico en nuestro país donde hemos dado un paso más hacia la igualdad de las familias, realzando el valor de la autonomía, entendiendo que las personas somos iguales y por lo tanto, tenemos los mismos derechos”.
Y agregó que “como Gobierno, creemos firmemente en la familia, en la institución del matrimonio y esta es una manera de proteger a nuestros compatriotas en sus distintas expresiones”. Y que “es clave que en nuestra sociedad valoremos la diversidad de identidades, de proyectos de vida y por supuesto, de amar”.
Lo que queda, es esperar a que la ley sea publicada en el Diario Oficial para que luego de 90 días entre en vigencia, esto sería antes de la primera quincena de marzo de 2022; donde las personas de nuestro país que lo deseen podrán contraer matrimonio sin importar su identidad de género. Mientras que la modificación de la Ley n°21.334 es efectiva desde su publicación.
Lo que cambia
Entre algunas de las modificaciones a la ley se considera cambiar las expresiones marido y/o mujer, por cónyuges sin distinción de género y el contrato de matrimonio se ejecutará entre dos personas y no entre un hombre y una mujer.
En el caso de los padres y las madres, se reemplazará por progenitores y sobre el régimen de cuidados de los niños y niñas, no se discriminará por la orientación sexual, identidad o expresión de género, filiación o apariencia personal. Y también, en materia de filiación, esta ley introduce modificaciones adecuatorias, para hacer compatible el sistema filiativo actual con los matrimonios entre personas del mismo sexo.
En relación a los matrimonios celebrados en el extranjero, producirá el mismo efecto en el país tal cual hubiese sido llevado a cabo en territorio chileno y al mismo tiempo se deroga el reconocimiento de los matrimonios entre personas del mismo sexo en el extranjero como Acuerdo de Unión Civil en Chile, puesto que pasan a tomar la misma categoría.
Texto: Antonieta Henríquez
