El pasado lunes, un hombre de 47 años llegó hasta el hospital de San Carlos con tres heridas en sus piernas, provocadas por arma de fuego, lo que motivó una investigación de la SIP de Carabineros.
Lo que pudo parecer un delito común, tendría otro trasfondo. La víctima fue objeto de agresión por parte de un grupo de personas, en represalia por sus constantes ataques, insultos y asaltos a transeúntes del centro de esa ciudad, ya que padece –conforme a lo explicado por el Ministerio Público- de problemas de salud mental, y ha tenido diversos problemas por su agresividad.
[bg_collapse view=”button-orange” color=”#4a4949″ expand_text=”Leer más” collapse_text=”Menos” inline_css=”width: 100%” ]Por tratarse, entonces, de una persona inimputable ante la ley, desde la propia Fiscalía solicitaron una reunión con el alcalde de esa comuna, Gastón Suazo, para explorar la posibilidad de activar algún protocolo municipal de salud mental, para internar al paciente.
Lejos de tratarse de un caso aislado en la región, desde la Red Salud de Ñuble confirman que sí hay más casos de personas que padecen de patologías similares, pero que al desistir de sus tratamientos pueden cursar episodios de agresividad.
“El porcentaje de atenciones de salud mental que en la red de salud de Ñuble no se efectúa por inasistencia del usuario o usuaria, durante 2021 fue de un 17% en el caso de psiquiatría adulto y un 11,9% en psiquiatría infantil. Se trata de cifras superiores al resto de las especialidades, dado principalmente por el perfil las personas que se atienden. La naturaleza de los cuadros, hace que exista una deserción mayor, ya que la asistencia a los controles es voluntaria, lo que no siempre se consigue pese al constante esfuerzo de los equipos de salud”, explicó la médico siquiatra Claudia Quezada, jefa del departamento de Salud Mental del SSÑ.
Sobre las posibilidades de internación no voluntaria, existen opciones normadas por el Ministerio de Salud, cuando se afecta el derecho a la libertad de las personas, por lo que solo procede si no es posible un tratamiento ambulatorio para la atención de un problema de salud mental y si existe una situación real de riesgo cierto e inminente para la vida o la integridad de la persona o de terceros. “Pero la hospitalización psiquiátrica involuntaria no puede deberse a su condición de discapacidad”, añadió.
Bomba de tiempo
Más conocido se ha hecho el caso de un vecino residente de un edificio del centro de Chillán, quien ha causado innumerables episodios de violencia, agresiones verbales, destrozos y amenazas a toda esa comunidad. Sin embargo, pese a los esfuerzos por acudir a las autoridades para que se genere alguna intervención, “nos dicen que no pueden hacer nada, que no sacan nada con llevárselo detenido porque es paciente siquiátrico, por lo tanto no puede ser formalizado, pero es terrible vivir así, es una bomba de tiempo, y en cualquier momento puede pasar algo muy grave”, explicaron vecinos a La Discusión.
Hay, de hecho, varias fotografías y videos suyos circulando en redes sociales, que lo muestran insultando a vecinos, intentando ingresar por la ventana a otros departamentos, siendo el más conocido y viralizado un registro reciente en el que aparece gritándole una serie de insultos a un carabinero que llegó al edificio acudiendo a un llamado de emergencia.
Consultas hechas por nuestro medio confirmaron que esta persona dejó de asistir a sus tratamientos hace varios meses.
Otro caso, si bien no violento, de la comuna es la de un hombre que suele bañarse desnudo en una pileta cercana a un establecimiento educacional del sector oriente de la comuna. Sin embargo, para que se pueda generar una hospitalización involuntaria, debe existir una derivación de algún profesional de salud que certifique la patología, previa presentación de antecedentes a la Seremi de Salud quién evalúa y cursa la orden de internación en algún establecimiento de la red asistencial.
“También existe la hospitalización que se tramita a través de la vía judicial, donde debe mediar una denuncia ante Carabineros o la Policía de Investigaciones, que de cuenta de hechos que ameriten la necesidad de proceder a la internación por esta vía. En este caso basta con la orden del juzgado respectivo, para proceder a la hospitalización”, advirtió la siquiatra.
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