Señor Director:
El último Informe de Política Monetaria entrega cifras alentadoras respecto a la marcha de la economía. Se mejoran las proyecciones de crecimiento del PIB a un rango entre 10,5% y 11,5%. Esta mayor base de comparación se traduce en una baja en la estimación de crecimiento para el próximo año, a un rango entre 1,5% y 2,5% y entre 1% y 2% para 2023. Esta baja tasa constituye un primer gran desafío para el próximo gobierno.
Un segundo desafío se refleja en los datos de la última Casen, que presenta cifras preocupantes respecto a la situación de pobreza en el país. En 2020, la tasa de pobreza total es un 10,8% que incluye un 4,3% de pobreza extrema, comparada con un 8,6% de pobreza total y un 2,3 % de pobreza extrema el año 2017.
Un tercer desafío se vincula con el empleo. Las estadísticas de empleo del INE muestran que, si bien se ha recuperado más de la mitad de los empleos perdidos en pandemia, la mayor parte corresponde a empleos informales y se mantiene una brecha importante en la tasa de ocupación femenina, que aún no se recupera de la fuerte caída sufrida el año 2020.
Los tres desafíos mencionados se vinculan con un desafío aún mayor: la necesidad de una nueva estrategia que logre un desarrollo inclusivo y sostenible para Chile, con protagonismo de las empresas de menor tamaño, con alianzas público-privadas, especialmente en regiones y con énfasis en la innovación, protegiendo nuestro medio ambiente.
El 21 de noviembre tendremos la oportunidad de elegir un equipo de gobierno capaz de abordar estos desafíos con cohesión social, justicia y en paz.
Ana María Correa
Economista