España decretó el domingo un toque de queda nocturno e Italia cerrará cines y teatros, así como restaurantes después de las 18H00, en una Europa golpeada por la segunda ola de coronavirus, que deja un nuevo récord de contagios por tercer día consecutivo en todo el mundo.
Ante una situación sanitaria considerada “extrema”, el presidente español, Pedro Sánchez, anunció el domingo la instauración del estado de alarma, en principio por 15 días, pero con intención de extenderlo hasta principios de mayo.
Este decreto va acompañado de la imposición de un toque de queda en todo el país desde las 23H00 hasta las 06H00, salvo en las islas Canarias donde la incidencia es menos elevada.
Algunas regiones ya se habían adelantado con restricciones locales, como Madrid, Castilla y León (norte), Valencia (este) y Granada (sur).
Se trata del segundo estado de alarma decretado en España, tras el impuesto en marzo y que duró hasta junio con un confinamiento general de la población para contener la primera ola de la pandemia, que causó casi 35.000 muertos en el país.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció el domingo que la víspera se confirmaron 465.319 casos de nuevo coronavirus, un nuevo récord mundial por tercer día consecutivo (449.720 el viernes y 437.247 el jueves).
Casi la mitad se registró en Europa, con 221.898 en un día. El continente acumula ya cerca de nueve millones de contagios y más de 260.000 muertos.
De acuerdo con la organización, el hemisferio norte se encuentra en un “momento crítico” de la pandemia, advirtió el viernes su director Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Francia registró el domingo un número récord diario de contagiados en ese país, después de que fueran diagnosticadas positivas 52.010 personas, según datos de Salud Pública. El número de muertos se incrementó en 116 y ya suma un total de 34.761 personas.
Restricciones en Italia
Ante la segunda ola, varios países europeos, como Francia, ya instauraron el toque de queda desde mediados de octubre.
En Italia, tres regiones con las ciudades más populosas lo adoptaron en los últimos días: Lazio (Roma, centro), Lombardía (Milán, noroeste) y Campania (Nápoles, sudoeste). Por lo menos otras dos regiones, Piamonte (norte) y Sicilia (sur), le seguirán los pasos en la semana.
Tras un récord de contagios el sábado –20.000 en 24 horas para más de 500.000 casos y 37.000 muertos–, el gobierno italiano endureció de nuevo las medidas.
Cines, teatros, gimnasios y piscinas cerrarán a partir del lunes y hasta el 24 noviembre. Los bares y restaurantes deberán dejar de servir después de las 18H00, y el 75% de las clases en los institutos y universidades continuarán por internet.
“El objetivo es claro: mantener la curva de contagios bajo control, pues es la única manera de poder gestionar la pandemia sin verse sumergidos”, explicó el domingo el primer ministro Giuseppe Conte.
Las medidas no siempre son bien recibidas. La noche del sábado, decenas de manifestantes de extrema derecha protestaron contra el toque de queda y se enfrentaron a la policía antidisturbios en el centro histórico de Roma.
“Esto nos va a destruir”, declaró a la AFP Augusto d’Alfonsi, propietario de un restaurante en la capital. “Ya hemos perdido el 50% de nuestra clientela este año. Sin ayuda del gobierno, estamos acabados”, aseguró a la AFP.
En Bélgica, las autoridades de Bruselas adelantaron el toque de queda de medianoche a las 22H00, ordenaron el cierre de tiendas a las 20H00 y prohibieron las actividades culturales y deportivas a partir del lunes.
En Francia, los diputados votaron el sábado prolongar hasta el 16 de febrero el estado de emergencia sanitaria, que autoriza al ejecutivo a aplicar restricciones frente a la crisis. El toque de queda de 21H00 a 06H00 afecta desde el sábado a 46 millones de franceses, por seis semanas.
La situación se ha vuelto grave también en el este del continente, con restricciones en Polonia, Eslovaquia y República Checa, entre otros. También en Bulgaria, donde el primer ministro Boiko Borisov anunció el domingo que dio positivo por coronavirus.
– Récord diario de casos en EEUU –
La pandemia ha dejado ya cerca de 1,2 millones de muertos en el mundo desde finales de diciembre, según un balance de la AFP del domingo.
Estados Unidos es el país más enlutado, con más de 224.000 decesos y 8,6 millones de contagios. El sábado registró un nuevo récord de casos diarios por segundo día consecutivo, con cerca de 89.000.
El candidato demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, acusó el domingo al jefe de Estado Donald Trump de rendirse ante el covid-19, señalando que la estrategia del gobierno desde el comienzo de la crisis ha sido “agitar la bandera blanca de la derrota y esperar que, si se lo ignora, el virus se irá”.
En América Latina y el Caribe, donde hay más de 387.000 muertos y cerca de 10,8 millones de contagios, Colombia superó el sábado el millón de casos de covid-19, con más de 30.000 fallecidos.
Ecuador, que vivió una explosión de casos al inicio de la pandemia que colapsó hospitales y funerarias, reportó este domingo un récord diario, 2.021 nuevos casos, que eleva el total a 161.635.
En Chile, millones de personas votaron para derogar la Constitución redactada durante la dictadura de Augusto Pinochet, en un plebiscito ajustado a las medidas sanitarias para evitar contagios.
Las urnas funcionaron excepcionalmente por 12 horas, con un horario especial para los mayores de 60 años, restricciones en los accesos y la prohibición de votar para los contagios activos de covid-19. El país acumula unos 500.000 contagiados y casi 14.000 fallecidos en casi ocho meses.