Como una cuenta pública “continuista”, sin grandes obras para la ciudad, lo que no significa que esté paralizada la actividad del gobierno comunal o no existan ideas que apunten al progreso de la capital regional, fuecalificada la cuenta pública entregada por el alcalde Sergio Zarzar al Concejo Municipal en el Teatro Municipal.
Como era previsible, la oposición y los ediles oficialistas tienen perspectivas diferentes respecto de lo que fue la propuesta del alcalde Sergio Zarzar, quien entregó un informe de lo ocurrido en la comuna durante el año pasado, en un momento sensible desde el punto de vista político, pues son pocos los que dudan que la campaña para la reelección está en marcha.
El alcalde refirió que “las arcas municipales tuvieron un alza del presupuesto desde $13.299 millones en 2009 a $41.670 millones en 2018, valor que triplica el monto en los 10 años de la gestión edilicia”.
Sin embargo, concejales como Camilo Benavente (PPD), Víctor Sepúlveda (PC) y Juan López Cruz (PR) pusieron de manifiesto que esa alza en los ingresos es algo “natural” y que se puede observar en todas las ciudades emergentes o capitales regionales como lo es Chillán, la que exhibe una actividad comercial que redunda en mayores aportes al municipio.
“El incremento del que habla el alcalde en su cuenta es algo que no puede ser destacado como un logro, pues no depende exclusivamente de su gestión, sino que representa un alza normal del orden de $2.000 millones cada año, lo que se puede observar en muchas otras ciudades”, subraya Camilo Benavente Jiménez.
Para el edil PPD, quien fue confirmado como carta al sillón municipal por su partido (ver página 9) “en la exposición del alcalde no hemos visto nada relevante. Es más, tenemos más de lo mismo y no están las grandes obras que pueden haber marcado esta administración. La última gran obra fue el Teatro Municipal y desde ahí han existido solo problemas para sacar delante iniciativas de inversión para la ciudad. Recordemos que el eslogan es que es el ‘alcalde de las grandes obras’ y eso no se cumplió el 2018”.
Benavente recalcó que si bien el año 2018 hubo inversiones en ciclovías, veredas y otros, no son “las grandes obras que el alcalde menciona como sello de su gestión e incluso vemos que existe cierta paralización en este sentido”.
Uno de los temas que habrían afectado la capacidad de generación de proyectos serían, a juicio del concejal, los cambios en la Secretaría de Planificación (Secpla),lo que habría derivado en que no hubiera una estrategia clara respecto del destino de la ciudad. De hecho este año han sido presentados pocas iniciativas al sistema de licitaciones del Estado, Mercado Público.
El concejal Juan López Cruz, por su parte, sostuvo que “la cuenta pública más que centrarse en lo ejecutado durante el año 2018, que no es una gran gestión, se orientó a promover los hechos que serán realizados durante el 2019 y 2020, lo que claramente implica que el alcalde y el municipio ya están pensando electoralmente”.
“El caballo de batalla del alcalde para su repostulación, tal como fue el año 2016, es sin lugar a dudas la instalación de luminarias LED por 4.200 millones de pesos, pero es un proyecto que tenemos que aprobar y del cual no conocemos nada”, cuestionó.
López agregó que “la Municipalidad pretende endeudarse con la Subdere, pero para eso va traspasar una deuda importante al próximo gobierno comunal y en ese sentido tenemos que ser muy cuidadosos en cuanto a traspasar deudas”.
El concejal Víctor Sepúlveda Barra, en tanto, reconoció igualmente que en la ciudad faltaron grandes obras, pero matizó con que la actividad del concejo que ha sido relevante ha estado orientada a satisfacer las necesidades de entidades como educación o salud,unidades que recibieron fondos importantes para que operaran el año 2018 sin dificultades.
El concejal remarcó que “las grandes obras que se ven en la ciudad y las que se verán desde este año en adelante como las modernizaciones de las avenidas Alonso de Ercilla, Huambalí y muchas otras que forman parte del Plan Maestro de Transportes, son de los ministerios de Transportes y de Vivienda, y no del municipio”.
Además, remarcó que el Parque Ultraestación “es una propuesta del Serviu y todo lo que son entrega de casas, del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, por lo que la Municipalidad no puede adjudicárselas”.
Añadió que “proyectos municipales propiamente tales tardan mucho en ejecutarse, como es el caso del esperado Parque del Aeródromo, respecto del cual no vemos avances, como tampoco la ampliación de pistas del cruce de Parque Lantaño”.
Defensa oficialista
A diferencia de los concejales de oposición, los oficialistas defendieron la gestión de la alcaldía. La concejala Nadia Kaik Gorayeb (RN) subrayó que “esta Municipalidad tiene una estructura financiera en orden, que le permite enfrentar muchas obras con recursos propios como luminarias LED, mejoramiento de veredas o destinar $400 millones para una nueva techumbre del mercado municipal en Isabel Riquelme”.
La concejala destacó como hitos la elaboración del Pladeco, la entrega de subvenciones, ayudas sociales o la resolución de un proyecto relevante como es la entrega de la concesión de áreas verdes.
Kaik puso de relieve que “con la llegada de fondos frescos desde el Casino de Juegos de Marina del Sol la Municipalidad tendrá holgura económica para atender necesidades urbanas de manera permanente”.
Pese a ello, Sepúlveda y Benavente plantean que en el caso del Pladeco surgió con serias dudas acerca de su capacidad para delinear el desarrollo urbano y además está por verse si los parques y jardines serán mantenidos como es el plan original.
“Tengo mis aprensiones respecto de la empresa que se hará cargo de las plazas y jardines, pues veo que tiene muy poco personal para tanta superficie que debe manejar y espero que se hagan ajustes para que no termine su contrato anticipadamente”, 
advirtió Sepúlveda.
En tanto, el alcalde Sergio Zarzar defendió durante su exposición a la comunidad el referido aumento de presupuesto de $13.299 millones en 2009 a $41.670 millones en 2018, junto a 63 proyectos ejecutados gracias al Fondo de Desarrollo Vecinal, 133 plazas con nuevas luminarias LED, dos nuevos programas “Quiero mi Barrio” y una gran cantidad de proyectos financiados con recursos propios del municipio.
Durante la Cuenta Pública Participativa 2018, que se realizó en el Teatro Municipal, el alcalde aseguró que durante el último año Chillán conformó las bases para proyectarse como una ciudad en sostenido crecimiento. “Somos valorados como un municipio probo y transparente, que además mantiene un orden financiero reconocido a nivel nacional. Nuestra ciudad nos brinda oportunidades como nunca antes, gracias al esfuerzo de toda una comunidad que está siendo protagonista de una nueva era y transición hacia el desarrollo”, fueron parte de las palabras de la primera autoridad comunal.
Dentro de los avances más significativos y destacados, se mostró la inauguración de la primera etapa del Plan Maestro de Aguas Lluvias junto al Ministerio de Obras Públicas, donde el municipio estuvo encargado de la gestión de este proyecto estructural. A su vez, se habilitaron ciclovías que se suman a los 21 kilómetros ya construidos, abarcando Avenida Libertad, el eje Brasil-Prat, Avenida Ecuador y Los Puelches, entre otras.
Igualmente, puso de relieve Zarzar que este año fue clave para el desarrollo del Pladeco Municipal, a cargo de la Secretaría de Planificación, un instrumento que contempla el seguimiento georreferenciado a través del portal municipal con las nueve zonas en que se dividió la comuna y sus 12 áreas estratégicas.
La misma oficina desarrolló un total de 63 proyectos comunales que se adjudicaron el Fondo de Desarrollo Vecinal (Fondeve), para el cual se destinó $152 millones dirigidos a seguridad ciudadana, infraestructura comunitaria y capacitaciones.
