La cancha del club de fútbol amateur Buenos Amigos de Chillán es solo un ejemplo de un factor de inseguridad que se repite en las inmediaciones de decenas de establecimientos educacionales de la comuna, y cuya necesidad de resguardo ya fue abordada en conjunto por la Municipalidad y Carabineros.
Denuncias por riñas, asaltos, cobro de “peajes”, microtráfico y vandalismo se han hecho algo más frecuentes en los entornos de estos establecimientos, generando sensación de inseguridad en alumnos, profesores, apoderados y personal administrativo.
[bg_collapse view=”button-orange” color=”#4a4949″ expand_text=”Leer más” collapse_text=”Menos” inline_css=”width: 100%” ]Por esta razón, el pasado lunes se reunieron en el Liceo Marta Colvin del sector Los Volcanes, el alcalde de Chillán Camilo Benavente, con representantes de varios estamentos locales, para buscar estrategias que permitan superar la sensación de inseguridad.
Las medidas que serán implementadas en los establecimientos y barrios periféricos serán de naturaleza integral, pues se refieren no solamente a mayor vigilancia policial, sino que también incluye medidas de apoyo a los estudiantes con el fin de generar ambientes seguros para ellos.
“Desde la Dirección de Educación, junto con la coordinación regional de Prevención de Delitos, estamos generando acciones en algunos sectores de la ciudad para que la comunidad entienda que estamos detrás todos en conjunto darle tranquilidad”, comentó el jefe comunal, quien reconoció que se han generado focos de violencia e incivilidades.
Como un segundo punto del mismo fenómeno se abordó el que al interior de los mismos establecimientos se haya experimentado un alza de casos de violencia escolar, fenómeno que es reiterativo en todas las regiones del país. Conforme a cifras de la Superintendencia de Educación, solo hasta junio pasado, en Ñuble se sumaban 105 denuncias por concepto de conciencia escolar, aunque no todos eran casos extrapolables a lo policial.
“Sin embargo, muchos de estos casos obedecen a una proyección que hacen los alumnos de los problemas que viven en sus hogares y en el entorno. Para nadie es un misterio que el tráfico de drogas, la presencia de armas en las calles y la violencia intrafamiliar son delitos que han aumentado en la comuna”, observó el concejal Rodrigo Ramírez, quien hizo referencia a este fenómeno durante la última reunión de Concejo Municipal, el día de ayer.
Patrullajes y televigilancia
Por el momento se dispuso de un sistema de vigilancia a través de drones de alta gama que tienen la capacidad de detectar incivilidades a grandes distancias y con gran nivel de detalles.
El coordinador de Seguridad Pública de Ñuble, Jorge Muñoz, dijo que “cuando ocurren incivilidades o algún delito o situación puntual que se esté evidenciando no solo en el establecimiento, sino que también en el perímetro, la televigilancia lo reporta a la central de monitoreo y se toman las acciones a través de carabineros para poder acudir”, resaltó Muñoz.
En tanto, el director de Educación, Marco Aguilera, explicó que para abordar la problemática al interior de los establecimientos, se han creado diversos planes especialmente enfocados a fortalecer la convivencia.
Durante la reunión realizada en el liceo, Carabineros comprometió apoyo para redoblar la vigilancia en los establecimientos educacionales donde apoderados han denunciado de manera interna y, en el caso puntual de los establecimientos aledaños a la cancha de Buenos Amigos, desde el concejo se instó al municipio a fortalecer la estructura de seguridad del perímetro para evitar el ingreso de personas al recinto.
“Los vecinos están sobrepasados por lo que ocurre en esa cancha, pero acá no hay otra opción sino invertir en seguridad, en luminarias y comprometer a la escuela y al club para que le den vida a la cancha”, propuso el concejal Ramírez.
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