Las comisiones unidas de Constitución y especial de la Mujer del Senado iniciaron ayer la discusión de la reforma que facilita el acceso de independientes y mujeres a la eventual Convención Constituyente de octubre próximo, la cual se definirá en el plebiscito de entrada del 26 de abril.
La instancia, presidida por el senador por Ñuble, Felipe Harboe (PPD) e integrada también por el local Víctor Pérez (UDI); recibió al director del Servel, y a expertas de diversas organizaciones para conocer sus opiniones sobre la reforma, que cumple su segundo trámite en el Senado.
Cabe recordar que estos temas se incluyeron anteriormente en la reforma que habilitó el proceso constituyente, pero por no ser parte del acuerdo por la Paz y Nueva Constitución, no alcanzaron el quórum necesario para su aprobación. De ahí que en la Cámara se presentara este proyecto, el que ya fue aprobado por los diputados, y que ahora debe ser sancionado en el Senado.
“Ha sido un buena discusión. Hemos escuchado a las politólogas, a Comunidad Mujer, al PNUD, con muy buenas intervenciones y un debate muy profundo. Acá al final del día lo que se tiene que instalar es un principio, el de la paridad, que la convención constituyente sea paritaria, y la fórmula para lograr aquello es la que tenemos que acordar”, sostuvo el senador Felipe Harboe.
Para el legislador, lo importante es que el mecanismo que se escoja sea lo suficientemente limpio “para evitar distorsiones profundas y garantizar la paridad. Hoy estamos discutiendo en torno a la fórmula, y no si es que debe haber paridad o no, y ése es un avance para el país. Si hoy las mujeres representan el 52% de la población de Chile, no veo ninguna razón por la que la Convención Constituyente, que definirá la Constitución que nos regulará por los próximos 30 ó 40 años, no esté integrada paritariamente”, expresó.
Respecto de la fórmula, Harboe planteó que la lista cerrada por distrito es solo una de ellas.
“Tal como lo hicimos en el Acuerdo Constitucional, prefiero no aventurar fórmulas todavía, sino tratar de buscar acuerdos. Mañana (hoy) tendremos reuniones con la oposición; lo mismo está haciendo el oficialismo, y después nos juntaremos para buscar un punto de encuentro”, sentenció el legislador del PPD.
“La menor distorsión”
En Chile Vamos, en tanto, sí ven la lista cerrada como la mejor opción.
“Se trató de la primera sesión, en la cual se dispuso escuchar al Servel y a distintas organizaciones, tanto de mujeres como de pueblos originarios. Lo que ya hay es un acuerdo político en torno a la paridad y las cuotas; la discusión ahora es sobre cuál será el mecanismo que se utilizará. Lo que nosotros buscamos como Chile Vamos es que sea el más democrático posible y el que menos correcciones implique, para que la gente no sienta que su voto no es respetado”, sostuvo el senador Víctor Pérez.
El gremialista puso énfasis en que “no podemos permitir que personas con más votos queden fuera por poner a otras. Es por eso que la discusión durante las próximas dos semanas va a estar centrada en el mecanismo que determinará cómo se expresarán la paridad, las cuotas de pueblos originarios y la participación de independientes”.
En ese sentido, la fórmula que está apoyando el oficialismo es la de listas cerradas por distrito, las cuales deberían contemplar un número par de representantes.
De acuerdo a este mecanismo, los electores no marcan preferencia por una persona, sino por un partido, y a partir de los votos de cada partido, los cuales se imputan a un pacto; se asignan escaños a cada partido, aplicando la cifra repartidora (D’Hondt).
“Lo ideal es que los distritos sean pares. Es decir, que en Ñuble, por ejemplo, en vez de elegir cinco se elijan seis, para respetar que se elijan tres y tres. El aumento de representantes no sería tanto, y se aplicaría solo para la elección de miembros constituyentes. Lo importante es que sería lo menos distorsionador, porque bajar a un hombre o a una mujer para meter a otro candidato sería frustrante”, afirmó.
De acuerdo al cronograma, el proyecto debiera verse en sala en dos semanas más, tras lo cual irá a tercer trámite en la Cámara, debido a las indicaciones presentadas.
La fecha límite para despachar esta ley, según quedó establecido en la reforma que habilitó el plebiscito, debiera ser el 25 de junio de 2020, 120 días antes de la elección, sin embargo, el Servel manifestó ayer en la comisión que lo ideal es que sea despachado 140 días antes, es decir el 5 de junio.
