El portero de Ñublense Miguel Jimenez cree que no es el momento para volver a lo que llama “seudonormalidad”.
Mientras en la ANFP y los clubes se proyecta el retorno del fútbol para julio, Jiménez la pone contra el piso y es realista.
Asegura que la “situación no está controlada y que no es el momento de volver”.
Insiste en que la industria del fútbol no puede anteponerse a la salud y vida de sus protagonistas considerando que aún no se vive el peack de la enfermedad.
Y los números así lo avalan. Ayer se registró el récord de casos diarios en Chile con 1.647 nuevos contagiados llegando a 28.866. Ñuble volvió a experimentar un alza con 11 nuevos casos.
Y si bien nuestra región se ubica en el séptimo lugar del ranking nacional entre las regiones con más casos de Covid-19, hay otras cuyos números encienden las alarmas. Y más si se trata de regiones donde se concentran clubes de Primera A y Primera B.
La zona más afectada sigue siendo la Región Metropolitana, con más de 20 mil contagiados, donde vislumbran un colapso del sistema hospitalario, seguida de la Región de La Araucanía (1.454), la de Antofagasta (978), Magallanes (893) y Bío Bío (899).
A pesar que la ANFP y su comisión propusieron un protocolo sanitario para volver a los entrenamientos con estrictas medidas sanitarias y luego retornar el torneo sin futbol, los primeros casos de Covid-19 en Everton y Colo Colo encendieron las alarmas y demostraron que el traicionero virus puede socavar la salud de los protagonistas del fútbol chileno, cuando proviene del entorno particular de cada uno de ellos. Por eso, no hay que bajar la guardia y seguir esperando por ahora un retorno que sería un tremendo riesgo concretarlo en pleno invierno.
