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El Rojo entra en fase 2 y diablos practican con balón

F. Venegas

“Hemos corrido como 100 kilómetros como preparándonos para una maratón”, reflexionaba hace un par de días en “Dimensión Deportiva”, el delantero de Ñublense, David Escalante, añorando el inicio de las prácticas presenciales con balón tras tres semanas de intenso trabajo físico sumando kilometraje bajo estrictas medidas sanitarias en el Complejo Paso Alejo.

El deseo de “Chiquito” se cumplió la mañana de este miércoles, porque los jugadores, tras dar negativo en el segundo test PCR, comenzaron a entrenar tomando contacto con el balón, pero manteniendo la distancia física con sus compañeros y realizando circuitos de toque entre dos compañeros.

Los jugadores confesaron que era la etapa más esperada porque echaban de menos pegarle al balón después de casi cuatro meses de pandemia.

“Es difícil llegar solo a correr y no tener contacto con los compañeros y no poder abrazarlos y decirles que los extrañaste, aunque uno tiene más afinidad con algunos, uno igual lo hace feliz, pero después va cansando el no poder ni siquiera darle un pase a un compañero. Pero ahora, afortunadamente, pasamos a la fase dos, cansado sí, pero muy contento en lo personal porque metimos el baloncito con una sola persona, podemos dar pases, rematar al arco y metimos otros ejercicios con paracaídas, con trineo de potencia. Estoy muy contento y vamos avanzando siguiendo el protocolo”, resume el zaguero central Andrés Díaz.

El delantero David Escalante cree que tras esta segunda fase llegarán bien preparados al torneo, si este se reanuda el 14 de agosto.

“Ha sido duro, tres semanas corriendo, pero pasamos a la segunda fase con balón, remates, más contacto y con confianza en Dios de que volveremos a jugar que es lo que uno quiere y la gente también. La parte física el cuerpo técnico la trabaja bien, con o sin pelota, nos exigen que debemos tener un peso y los entrenamientos son duros, pero creo que la ventaja que podemos tener es que el cuerpo técnico le da énfasis en el trabajo del día a día, hemos corrido 100 kilómetros en tres semanas y media y está bien para tener una buena base para lo que viene. El equipo sabe a lo que juega”, complementa Escalante.

Con balón y preparados

El técnico de los diablos rojos recalcó que en esta fase los jugadores recuperarán la sintonía fina con el balón, pero que “en ningún caso los voy a apurar porque se proyecta el inicio del torneo para que no haya lesionados”.

El preparador físico Claudio “Cayito” Muñoz aplaudió el profesionalismo de los jugadores para adaptarse al protocolo sanitario para ir avanzando en fases.

“Todos han trabajado bien, algunos que llegaron con un poquito de sobrepeso, ya se han puesto a tono y sumamos kilometraje para la segunda fase”, recalca.

“Yo creo que el compromiso es total de parte de mis compañeros, esto es algo nuevo,incluso por zoom, que no era lo mismo, siempre estuvo la mejor disposición. Algunos entrenan más de la cuenta, otros intentan motivarse y todos apoyan. Yo creo que no nos costará volver a jugar, ya que fuimos uno de los primeros que volvimos a entrenar, comparado con los de Santiago que volverán solo este jueves. Ahora vamos a entrenar solo con balón, sin dejar la parte física de lado”, insiste Díaz, quien releva el aporte del técnico Jaime García.

“Es un rol importante el que cumple el profe. Siempre nos motiva, ahora en cancha, siempre nos alienta a todos, sin importar si juegas o no, se preocupa de todos, hasta del último que pueda estar en la fila. Y el sicólogo Alexi Ponce también ha sido clave, uno lo puede llamar a cualquier hora y día y siempre está para aconsejarte”, sentencia Andrés Díaz, feliz porque todos pudieron volver a tocar a la redonda querida.

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