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Discusión en particular será clave para garantizar proceso de voto anticipado

Ampliar las posibilidades para el ejercicio del derecho a sufragio a un amplio espectro de personas que, por distintas razones, no pueden ejercerlo en la práctica, es el objetivo del proyecto aprobado el martes pasado, en general, por la Sala de la Cámara de Diputados, por 125 votos a favor, nueve en contra y nueve abstenciones.

La propuesta, de acuerdo al informe de la comisión de Gobierno Interior que rindió la diputada Andrea Parra (PPD), habilita el voto anticipado y define que, para facilitar el voto de adultos mayores, de quienes tengan problemas de movilidad funcional, de personas que se encuentren en cuarentena por motivos de salud, o que estén en grupos de riesgo, así como de quienes se encuentren privadas de libertad, el Servicio Electoral podrá facilitar el voto anticipado.

Para hacer efectivo lo anterior, el Servel constituirá mesas receptoras especiales una semana antes del día de la jornada electoral.

En el debate, la mayor parte de los legisladores remarcaron la importancia de avanzar en la iniciativa, entendiendo la necesidad de facilitar el derecho a voto a personas que no pueden hacerlo en el proceso eleccionario regular, y para contrarrestar las cifras a la baja de participación ciudadana en las elecciones.

Asimismo, se resaltó la transversalidad del acuerdo alcanzado en la comisión de Gobierno y la participación del Servel y del Ejecutivo en la confección de las normas, las cuales se esperan perfeccionar por medio de indicaciones en la discusión en particular.

En la oportunidad, sin embargo, también hubo opiniones contrarias a la propuesta. En este marco, se argumentó que el voto anticipado puede generar situaciones de fraude, y que la obligación de cada ciudadano es la de concurrir a los locales en la ocasión respectiva. Además, se estimó que la fórmula no tendrá efecto con parte de los supuestos favorecidos, ya que igualmente sería voto presencial, y se expresó preocupación por tener que resguardarse las urnas durante una semana.

En representación del Ejecutivo, el exministro Secretario General de la Presidencia, Cristián Monckeberg, refrendó la voluntad del Gobierno de avanzar en el voto anticipado, y destacó el consenso respecto de determinar un padrón especial para cada proceso, partir con grupos focalizados, y que se escruten los votos en el día de la elección general. Asimismo, remarcó la importancia de continuar con el trámite haciendo nuevos perfeccionamientos a la iniciativa.

Trazabilidad

Sobre el proyecto, el diputado por Ñuble, Jorge Sabag (DC) precisó que “debemos modernizar y actualizar nuestra democracia y sacar ejemplos positivos de otros países, como los llamados ‘acuerdos especiales de votación’, que dada la contingencia sanitaria, permitieron implementar transformaciones en los sistemas de votación, entregando mayores facilidades para emitir el sufragio a quienes tienen dificultades para ejercer su derecho”, aseveró.

Según el legislador, “si bien se sigue considerando a la votación personal, presencial en el día de las elecciones; igual deben existir alternativas como el voto anticipado en lugar de votación, voto a través de correo postal, votación a través de urnas móviles y el voto por poder”.

Agregó que “es de suma importancia facilitar el voto de las personas que desean votar, pero no lo pueden hacer debido a diversas situaciones, sobre todo, en el momento sanitario que estamos viviendo hoy”.

En tanto, el diputado Gustavo Sanhueza (UDI), sostuvo que “es una muy buena idea, pero tiene muchas complejidades en torno a su implementación. Cómo, por un lado, se garantiza la trazabilidad del voto, la posibilidad que se extravíe, en fin, hay que dar garantías de que el voto que se emite, es el que llegará. Ése es el resguardo que tiene nuestro actual sistema, con los apoderados, en cambio en el voto por correo se debe buscar una metodología para resguardar el proceso”, advirtió, adelantando que se debe trabajar en conjunto con el Servel y las fuerzas de orden para mejorar la iniciativa.

Su par de RN, Frank Sauerbaum, resaltó que “todos los instrumentos que aumenten la participación electoral son positivos. No tenemos, eso sí, que perder como objetivo la transparencia y el patrimonio que tiene el sistema electoral chileno, por lo tanto, soy partidario que implementemos todas las formas de participación posibles, pero resguardando los datos certeros y fidedignos, sin la comisión de hechos irregulares”, dijo.

Experiencia en EE.UU.

La politóloga y académica de la UdeC, Jeanne Simon, tiene una amplia experiencia votando en las elecciones de su país, Estados Unidos, desde que vive en Chile.

“Allá, el proceso está descentralizado en cada Estado. Los votos nos los envían tres meses antes de la elección, y en las últimas elecciones presidenciales, incluso me ha llegado con un mes de anticipación a Chile”, afirmó.
“En algunas ocasiones, ha habido muchos votos que fueron rechazados por no cumplir con los requisitos (voto nulo), por no haber firmado el voto o el sobre. Por lo mismo, varios Estados implementaron un sistema para informar si fue rechazado o no”, dijo.

Respecto del caso chileno, y el debate que surgió previo al plebiscito de octubre, para poder implementar el voto anticipado, sostuvo que “me parece que no hay suficiente anticipación de los problemas que se podrían generar en su puesta en práctica, en especial, en relación a la seguridad del voto. Me preocupan los procesos al interior de Correos Chile”, sentenció.

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