“Metamorfosis de un recuerdo de infancia” se titula el relato escrito por la profesora de Artes y Tecnología, Haydee González Rodriguez, que la llevó a obtener el Primer Lugar Regional del Concurso Literario Autobiográfico “Confieso que he vivido” convocado por el Servicio Nacional del Adulto Mayor, Senama, en su sexta versión.
“Este relato está basado en mi infancia, vivía yo en una casa quinta en Santiago donde todo era muy hermoso y los recuerdos de la cocina de mi abuela, de tantas cosas, eso me inspiró y la curiosidad infantil de los 8, 9 años de edad, de saber por qué estaban esas orugas y por qué se convertían en mariposas. Mi gran sueño es hacer un libro, estoy recopilando lo que he escrito”, confiesa Haydee Rodríguez quien hoy se encuentra jubilada tras 25 años de docencia al interior del Instituto San María de Chillán.
El certamen, de carácter nacional, es parte del Plan Nacional de Lectura y busca promover el envejecimiento activo consolidándose hoy como una instancia para que las personas mayores compartan sus experiencias de vida con otras generaciones a través de relatos autobiográficos.
“Queremos destacar a los 49 relatos de adultos mayores que participaron en Ñuble, felicitar a cada uno de ellos por atreverse, a la señora Haydee especialmente, pero también a dos ganadoras a la mención honrosa, la señora Gladys Sepúlveda, de la comuna de Quirihue, con su relato “Un invasor inesperado” y a Ivón Vásquez Yañez, de Cobquecura, con su relato “Mi amiga Laura”, expresó la seremi de Desarrollo Social y Familia, Doris Osses, quien entregó un galvano de reconocimiento a la ganadora del primer lugar.
“En Ñuble hemos tenido un incremento de 149% de participación respecto de 2019, lo que demuestra que cada vez hay más personas mayores interesadas en participar de esta maravillosa instancia”, agregó la autoridad.
En su versión 2020 esta iniciativa batió un record de participación con 1.314 relatos nacionales y 30 de distintos países de habla hispana. Asimismo, este año se incluyó una mención honrosa inclusiva, por el relato en lengua de señas de Carmen Forcano, de 100 años y que fue llevado al papel por su nieta.
