Luego que el ministro de Economía, Lucas Palacios, anunciara este jueves que los casinos de juego podrán reabrir en Fase 3, bajo ciertas restricciones sanitarias, Nicolás Imschenetzky, presidente de Marina de Sol, firma que opera salas en Chillán, Concepción, Osorno y Calama, valoró la decisión de la autoridad, sin embargo, lamentó un supuesto trato preferencial del regulador con la operadora Enjoy.
Según dio a conocer el titular de Economía en una actividad realizada en Viña del Mar, donde Enjoy tiene la concesión del casino municipal, los recintos que estén en comunas en Fase de Preparación (Fase 3) podrán funcionar solo con las máquinas de juego, únicamente en espacios abiertos, con un distanciamiento mínimo de al menos dos metros lineales entre los asientos de cada máquina, o con una distancia de un metro lineal si entre los asientos está instalada una barrera física que impida el contacto directo.
En la Fase 4, en tanto, los casinos de juego podrán abrir en interior, solo con máquinas de juegos y con la misma distancia de dos metros entre los asientos de cada máquina y, finalmente, en la Fase 5, de Apertura avanzada, podrán funcionar al interior con todas sus actividades, pero con el 50% de aforo.
Palacios resaltó que “este es un paso más que estamos dando para poder incorporar a personas que están con su contrato suspendido o están sin empleo. La industria de los casinos es extraordinariamente importante para el turismo de nuestro país. No solamente por lo que son las salas de juegos, sino porque también tiene restaurantes, tiene hoteles, tiene actividades corporativas, eventos, espectáculos. Es muy importante para los turistas nacionales y extranjeros”.
De esta forma, la autoridad acogió la solicitud de los operadores agrupados en la Asociación Chilena de Casinos de Juego, puesto que hasta antes del anuncio, las salas de juego solo podían abrir en Fase 4 ó 5, una medida informada en octubre que flexibilizó lo dispuesto en agosto, en que se permitía la operación de estos establecimientos exclusivamente en Fase 5.
La propuesta de protocolo presentada a las autoridades por los operadores hace un mes fue el resultado de un trabajo con las mutuales de seguridad. En concreto, proponían una reapertura de los casinos en forma parcial y gradualmente en los pasos 3, 4 y 5. A modo de ejemplo, si un recinto está ubicado en una comuna en Fase 3, pedían que se permitiera operar solo con máquinas tragamonedas, y que en Fase 4 la oferta a los clientes se amplíe a mesas de juego. Y en Fase 5, que se incluyan discotecas, eventos y mayores aforos.
Nicolás Imschenetzky sostuvo que “un tragamonedas, donde un cliente se sienta y puede pasar entre 10 minutos a 1 hora, es muy fácil de limpiar, el cliente está sentado solo y, además, las máquinas se pueden colocar a distancia suficiente para que se mantenga el distanciamiento social. Con un aforo acotado y medidas sanitarias adecuadas, los tragamonedas pueden abrir perfectamente en Fase 3”.
Respecto a la decisión anunciada por el ministro Palacios, Imschenetzky manifestó que “la apertura es muy importante, sobre todo, por nuestra gente, pero es un paso, entre comillas, secundario, en la reclamación que hacemos. Nosotros, como industria, seguimos muy preocupados por el tema de las licencias”, en alusión a la controversia que existe entre la Asociación Chilena de Casinos de Juego y el regulador, por “cambios a las reglas del juego”.
Comentó que debido a esta situación no tienen respuesta frente a las consultas de los trabajadores o de los municipios que quieren saber cuándo volverán a funcionar. “Y ahora nos enteramos que el primero que va a poder reabrir es Enjoy, con protocolos que no sé cómo los obtuvieron, porque yo no los tengo, entonces, yo no sé cómo ellos están listos para abrir”, profundizando la crítica del gremio respecto a un “trato privilegiado” de parte del regulador con dicha firma.
En cuanto a los protocolos sanitarios, expresó que “efectivamente salieron protocolos, nosotros estábamos al tanto de un borrador, pero no sabíamos más allá, por lo que estamos preparándonos sobre esas medidas, para poder trabajar todas las salas y que cumplan las medidas, pero nosotros conocimos el borrador hace un par de días”.
El empresario reafirmó que “hay que esperar a que Chillán pase a Fase 3, antes de eso, es imposible”; y destacó que “en Chillán tenemos una muy buena terraza, que va a permitir que podamos contar con una buena cantidad de tragamonedas en este Paso 3, pero en otros lugares va a ser mucho más complejo. Esperamos que esta situación la puedan revisar el Ministerio de Salud, el Ministerio de Economía y la Superintendencia de Casinos, y que sean un poco más flexibles hacia adelante”.
Marco legal
En una conferencia de prensa conjunta con representantes de los demás integrantes de la Asociación -a la que Enjoy no pertenece- ofrecida el jueves, Imschenetzky criticó el actuar de la autoridad en el actual proceso licitatorio, donde aseguró que los operadores no fueron debidamente escuchados por las autoridades, al tomar decisiones que cambian las reglas de juego en la renovación de licencias.
“Se nos están cambiando las reglas de juego. Hoy el cambio de normativas es radical, y no se nos invitó a participar en estos cambios”, dijo.
“Este nuevo modelo fue criticado ampliamente por nosotros en los años 2015 y 2016, y tal es así que nuestro grupo decidió no participar en las licitaciones posteriores, bajo estas condiciones. Lamentablemente, nunca nos imaginamos que íbamos a tener que trabajar con estas reglas de juego en las renovaciones que ya fueron acordadas, y que en el texto de la Ley queda claramente definido que no deberían ser aplicadas a nuestros casos”, argumentó.
Recordó que “en su momento, tomamos decisiones e invertimos bajo reglas de juego claras -explicó-, y nos han modificado dichas reglas de forma injusta e inconsulta. Y lo peor es que desde hace nueve meses, hemos buscado canales de diálogo, y nadie nos escucha”.
