Close
Radio Radio Radio Radio

Bien público

La relación entre la opinión pública y los medios de prensa es uno de los temas más debatidos de nuestro tiempo. Muchos piensan que la prensa es en buena medida responsable de los cursos que sigue la opinión pública en su continuo devenir. Otros tienden a ser más optimistas acerca de esa relación y asumen que una prensa responsable es un bien público, un bien que mejora la calidad de vida de cualquier sociedad.

La prensa escrita apareció en la historia a comienzos del siglo XIX. Desde el siglo XVIII se publicaban algunos diarios, pero con máquinas primitivas que no permitían tiradas de más de unos pocos cientos de ejemplares. En el siglo XIX se desarrolló la imprenta moderna, capaz de producir varios miles de copias en unas pocas horas. Así apareció el medio de prensa masivo.

Este diario fue parte de ese proceso. En 151 años hemos sido testigos presenciales de los diferentes avances tecnológicos y editoriales que fue experimentando una actividad en constante transformación, que en este siglo se comporta de modo similar a otras ramas de la economía, donde las necesidades, preferencias e intereses de los consumidores son orientadores de nuevos lenguajes y productos. Por lo mismo, es bastante heterogénea, aunque hoy todos sus actores comparten una misma misión y responsabilidad, que es servir a sus audiencias, ser sensible con las necesidades de las personas, reflejar sus tendencias de vida, ayudarlas a tomar decisiones para mejorar su existencia y entregarles antecedentes y contextos para que entiendan mejor la actualidad y no sucumban a la otra pandemia de estos tiempos: las noticias falsas.

Por todo lo anterior, al conmemorar 151 años de vida periodística, es oportuno hacer también un examen de conciencia para saber hasta qué punto estamos siendo útiles para los ciudadanos y cuánto estamos contribuyendo a mejorar la realidad social.

Naturalmente, la nuestra es también una misión en la que a veces se pueden cometer errores, pero siempre ha sido honesta con sus postulados y su historia y, por lo tanto, no ha transado la independencia, y responsabilidad para informar, interpretar y opinar sobre los hechos de interés público que ocurren en nuestra región.

La actual pandemia ha dejado a numerosos medios de información de todo el país en cuidados intensivos por causa del desplome de sus ingresos. Esta realidad es muy preocupante, pues crece el riesgo de que aumenten los “desiertos informativos”, o sea zonas donde ya no existan medios que informen sobre lo que allí ocurre. Un escenario soñado para quienes se incomodan con los ojos avizores de la prensa y prefieren la opacidad y el secretismo para ejercer funciones públicas o hacer negocios.

Queda claro, entonces, por qué en medio de una crisis sanitaria que ha propiciado tantas noticias falsas y desinformación que circula a borbotones por las redes, la información confiable a cargo de equipos periodísticos rigurosos y competentes es un bien público que mejora la calidad de vida de cualquier sociedad, la nuestra incluida.

Agregar un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *

Leave a comment
scroll to top